Operación Telaraña Ucraniana

Última actualización el 13 junio 2025

Antecedentes y Contexto Estratégico

El 1 de junio de 2025, el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) inició la Operación Telaraña, un asalto encubierto con drones cuidadosamente planificado, dirigido a cinco bases aéreas rusas —Belaya, Diáguilevo, Ivánovo Séverny, Olenya y Ukrainka— que abarcaban cinco zonas horarias en lo profundo del territorio ruso. La operación fue la culminación de más de 18 meses de preparación, gestionada bajo la dirección directa del jefe del SBU, Vasyl Malyuk, y del presidente Zelenskyy.

Planificación, Logística y Técnicas Operativas

El despliegue de drones aprovechó 117 cuadricópteros FPV Osa de fabricación ucraniana, cada uno con cargas explosivas. Estos drones fueron introducidos de contrabando en Rusia, ocultos dentro de cabinas modulares de madera montadas en camiones de plataforma plana conducidos por conductores rusos inconscientes. A medida que los camiones se acercaban a las bases objetivo, los conductores recibieron instrucciones telefónicas para estacionar, levantar remotamente los techos de las cabinas y liberar los drones. Los agentes ensamblaron y cargaron los drones en un almacén cerca de Cheliábinsk, y luego partieron de forma segura antes del lanzamiento.

Tecnología y Sistemas de Puntería

La navegación se basó en ArduPilot, un software de piloto automático de código abierto de casi 20 años de antigüedad que permite la navegación por puntos de referencia y la resistencia a la interferencia de GPS. La puntería en tiempo real empleó reconocimiento de imágenes asistido por IA para identificar características de las aeronaves, como los tanques de combustible de las alas; los modelos de aprendizaje profundo se entrenaron utilizando imágenes de Tu-22M3 del museo de Poltava. Los drones FPV tenían autonomía a prueba de fallos para completar misiones incluso si las comunicaciones se interrumpían.

Ejecución y Evaluación de Daños

El ataque infligió daños en múltiples bases aéreas:

Cifras oficiales ucranianas afirman 41 aeronaves alcanzadas con al menos 13 destruidas, mientras que las evaluaciones de EE. UU. reportan 20 alcanzadas, incluyendo 10 destruidas, lo que en conjunto representa aproximadamente un tercio de la fuerza de bombarderos estratégicos de Rusia. El daño financiero ascendió a aproximadamente US $7 mil millones, logrado con drones que costaban apenas unos pocos miles de dólares cada uno.

Innovaciones Tecnológicas y Tácticas

Efectos Estratégicos y Psicológicos