Misil Khorramshahr

El Khorramshahr es un misil balístico de alcance medio cuyo diseño se deriva del Hwasong-10 norcoreano. Una versión de este misil extranjero, denominado BM-25, fue adquirida por Irán, que luego desarrolló una variante de fabricación propia que era más pequeña y descrita como más táctica. Esta modificación implicó la reducción de la masa de propelente, lo que a su vez afectó su alcance operativo. Según se informa, el sistema fue probado por primera vez a principios de 2017, seguido de otra prueba en 2020 que incorporó un pequeño vehículo de reentrada diseñado para extender potencialmente su alcance y mejorar la precisión.

El sistema es un misil de combustible líquido capaz de alcanzar velocidades desde supersónicas altas hasta hipersónicas. Su capacidad más destacada es su capacidad para transportar una ojiva muy pesada, lo que ofrece el potencial de transportar una carga útil nuclear. Si bien su tamaño genera incertidumbre sobre su capacidad para transportar múltiples ojivas nucleares, funcionarios han declarado que posee capacidad para múltiples ojivas. En lugar de usar alas para la estabilización, el misil es controlado por un motor principal y salidas de gas más pequeñas y separadas para la maniobra. Una variante avanzada, el Khorramshahr-4, incorpora mejoras significativas, incluyendo un motor que utiliza combustibles hipergólicos almacenables, un fuselaje compuesto más resistente y un sistema de guiado de fase intermedia. Este sistema permite que el misil corrija su trayectoria mientras está fuera de la atmósfera, haciéndolo menos vulnerable a la guerra electrónica en la fase terminal.

Lanzado desde plataformas móviles, el misil Khorramshahr ofrece una flexibilidad operativa significativa. Desde sitios de lanzamiento en el oeste de Irán, su alcance le permite poner en riesgo objetivos en todo Oriente Medio, incluyendo Israel, Egipto y Arabia Saudita, así como partes del sudeste de Europa. Algunos analistas creen que su verdadero alcance podría ser mayor, limitado intencionalmente durante las pruebas mediante el uso de ojivas más pesadas de lo normal. La variante avanzada Khorramshahr-4 mejora aún más su uso táctico, ya que su combustible almacenable puede mantenerse en los tanques del misil durante largos períodos, reduciendo el tiempo de preparación para el lanzamiento a solo minutos.